martes, 25 de mayo de 2010

¡Ay, mi Sevilla!

A pesar de ser un riojano a mucha honra, algunas veces me planteo cambiar mi tierra natal a Sevilla. Es una ciudad que me atrae mucho.

Si analizara bien las razones por las que me gustaría haber crecido en esa ciudad, todo se resume en los hombres que están desatados en sus calles. Madrid no se queda atrás, pero Sevilla me parece que le gana en porcentaje de gays por metro cuadrado. Si añado mi debilidad extrema por los morenos andaluces, mi opción como ciudad adoptiva toma sentido.

Siempre me han gustado la normalidad y la cotidianeidad en la cara de los hombres. Todo lo que denote una pizca de artificialidad y de fingimiento me produce escalofríos. Eso es lo mejor de los sevillanos.

PD: tampoco hay que olvidar los morenazos con ojos azules de Jerez de la Frontera, hay que ser justos.

NOTA: Hoy no hay foto. Ya he visto que mi amigo Rafa es el mejor de los anfitriones, hay fotos de todos los Gualdalkibears

No hay comentarios:

Publicar un comentario