En la fallida salida nocturna de hoy se ha llegado a contemplar la opción de fiesta de pijamas. Una de esas sesiones típicas de prototipos al estilo W. Jones y otras semejantes de adicción a los estrógenos. El guapo ha sugerido como ejemplo de película perfecta para una fiesta de pijamas 'quédate a mi lado'. Una película alcanza este género sólo si los espectadores gastan al menos una media de cinco tissues por visualización. Además suelen incrementar el gasto de kleenex cuando el espectador aumenta el número de pases.
Al llegar a casa me he encontrado un reportaje en el País sobre la serie 'Aquellos Maravillosos Años'. Por supuesto, la canción de la cabecera no podía faltar. No sé que tiene la canción de Joe Cocker, no puedo escuchar prácticamente ni dos compases. Es una tortura china. Dejo el link, pero ya me diréis si tiene buena calidad y está completo. Yo no lo voy a oír.
